Juan Solabre Lazcano, otro de los grandes criptoanalistas españoles del siglo XX, nace el 14 de diciembre de 1897. Jefe del Cuerpo de Telégrafos al estallar la guerra, se pone al servicio del general Mola encargándose de cifra, descifrado y descriptación. Es en este último apartado en el que destaca, ya que, al igual que Nicolau, Solabre era extremadamente intuitivo. En marzo de 1937 pasa al SIPM de Burgos encargándose de las mismas labores hasta mayo de ese mismo año en que empieza a trabajar en criptoanálisis. Su trabajo fue más que meritorio ya que él solo consiguió romper la mitad de las claves que consiguió el servicio de criptoanálisis del SIPM. Acabada la guerra es llamado al gabinete de criptoanálisis del Alto Estado Mayor, destino en el que sirvió como capitán honorario, aunque oficialmente adscrito al Cuerpo de Telégrafos, especializándose en códigos diplomáticos, en los que era un auténtico experto. Modesto y trabajador incansable, muere el 19 de abril de 1970.